domingo, 5 de septiembre de 2010

Práctica 1: árbol


El suelo parecía querer llegar a las manzanas del árbol con ayuda de las enredaderas. Las ramas del árbol, cuyos colores recordaban a los de una jirafa a la inversa, se agitaban con el viento como si quisieran agarrar a Noah. Desde niño Noah había contemplado el hipnótico movimiento que zarandeaba los frutos como ofreciéndoselos. Hoy Noah todavía contempla el árbol desde la misma ventana de su casa; ya que cuando sus padres se fueron a vivir fuera de Oxford se la dejaron.
Eran las diez de la noche cuando Freddie llegó con su correspondiente cargamento de amigos y bebidas para comenzar la fiesta. Cuando Freddie se enteró de que Noah iba a vivir solo se instaló en una de las habitaciones. Era más un okupa que un amigo, pero era buena gente.
-¿Sabes lo que le hace falta a ese árbol tuyo? unas cuantas luces en plan Navidad para darle vida a este sitio, porque la verdad, si no estoy yo esto es bastante deprimente- dijo Freddie esperando la risa fácil de la gente.
-¿No crees que tiene suficiente con las manzanas?- preguntó Noah mostrándose apático ante esa idea. La vida le parecía gris, en eso tenía razón Freddie, pero esa no era una razón suficiente para disfrazar el árbol.
Sin mediar palabra, Freddie cogió las llaves de su coche, abrió la puerta y se fue. El motor sonaba mientras se alejaba. Nadie sabía donde se había metido, y tras media hora de espera y unas cuantas copas, la fiesta se fue olvidando de Freddie. Sólo en el momento en el que se fue la luz de la casa Noah se volvió a acordar de él. Tras la oscuridad, la gente en el interior de la casa fue cegada con unos focos sin saber qué pasaba. Cuando el descontrol y el miedo parecían estar conquistando la casa, los focos se apagaron y la puerta se abrió.
Noah salió el primero, inquieto mientras los demás le seguían unos pasos por detrás. En el patio, el árbol brillaba iluminado por un montón de luces de Navidad y decorado con las primeras chorradas que Freddie había encontrado. Una máscara de lucha mexicana descansaba en la rama más grande acompañada de un palo de hockey y un osito de peluche.El suelo parecía querer llegar a las manzanas del árbol con ayuda de las enredaderas, pero Freddie le ganó.

No hay comentarios:

Publicar un comentario